Yo, cuando compré mi stratocaster, por el 95 o 96, andaba mas verde que el fairy y no tenia idea de modelos, especificaciones, marcas ni ostias, solo sabia que "tenia que poner Fender made in U.s.a. en la pala y ser clavadita a la de la contraportada del disco "Layla and etc"..por entonces, mi disco favorito". El dueño de la tienda, Bosco en Zaragoza, (desaparecida ya, ahora funciona con otro nombre), enseguida me caló y me dijo que probara una de las que tenia colgadas, ofreciéndome una strat pero con el mastil "oscuro y no claro", me enchufo y me puse a tocar el romance anónimo, con el pulgar y solamente la primera cuerda (para mí, un logro, pero me parece que no le impresioné demasiado..). Yo le dije que me daba igual como sonase, que quería la guitarra del Clapton y esa tenia el mástil oscuro y la quería ya. El muy tuno, viendo lo astuto que yo era en instrumentos y no teniendo ninguna en stock como la que yo quería, no se le ocurrió mas que, decirme que no me preocupara, que le cambiaba el mástil por el de otra (de distinto color de mueble), con lo que me quedó una guitarra distinta de la que salió de fábrica. No tengo ni idea del modelo de strat del que le quitó el mástil, ni de qué año era, (acertó de pleno, porque es una delicia de mástil y esto dicho por gente que se dedica a ello, no solo por mí). Yo, más contento que chupita y él aún mas, cuando le solté las 120.000 cucas al contado mientras me la preparaban.
La guinda fué cuando le dije que si me la daría con cuerdas (yo me refería a cuerdas nuevas y no las que le habian quitado) pero no lo dije así. El tío me miró con una cara de infinita paciencia y me soltó: "No, te la voy a dar sin cuerdas, alma de cántaro.....cómo te voy a vender una guitarra sin cuerdas....."
En fin, la guitarra venia con un estuche rígido Fender, que a los pocos días, fué a un contenedor de basura, porque yo la queria colgada de la pared y el estuche me ocupaba mucho sitio. A alguno le alegré el día.
La guinda fué cuando le dije que si me la daría con cuerdas (yo me refería a cuerdas nuevas y no las que le habian quitado) pero no lo dije así. El tío me miró con una cara de infinita paciencia y me soltó: "No, te la voy a dar sin cuerdas, alma de cántaro.....cómo te voy a vender una guitarra sin cuerdas....."
En fin, la guitarra venia con un estuche rígido Fender, que a los pocos días, fué a un contenedor de basura, porque yo la queria colgada de la pared y el estuche me ocupaba mucho sitio. A alguno le alegré el día.