Los grupos nacen,crecen, se desarrollan, viven y mueren.
Si llevas el gusanillo de la música bien incrustado, lo llevarás de por vida. Busca en tu interior. Aquellas cosas que no hiciste, busca nuevos compañeros de banda, trabaja y disfruta en casa. Son épocas que todos hemos tenido.
Pero como ya he dicho: si la música está en ti, seguirá contigo.
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Gracias, compañeros...
Es una situación extraña, la verdad... bueno, el tiempo dirá... desde luego, tengo ganas de coger la guitarra, de componer, de mejorar mi sonido acústico... el gusanillo sigue ahí... lo mismo es que me estoy convirtiendo en un auténtico "cansautor", jajaja...
He de decir, al respecto del "cantautorismo", que es una faceta que da sus alegrías... los mismos temas que tocaba con la banda, a toda hostia, los interpretó ahora de una manera más tranquila y expresiva... parecen otras canciones... también, por contra, cuando metes una cagada, no tienes a nadie cerca a quien echar la culpa, jajaja
Un saludo....
Sigue buscando gente con la que tocar, aunque no sean ensayos casuales y no se puedan terminar de materializar. Y si eres tú quien compone o tiene una idea clara de qué tipo grupo y qué canciones tocar defínelo y busca gente. Y si no puedes dar forma a una banda intenta incorporarte a otra. Lo importante siempre es encontrar buena gente que comparta las mismas inquietudes y esté más o menos en el mismo momento vital (al menos con respecto a la música).
Hay que seguir peleando siempre!
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Todo lo que comentáis es cierto, tener que depender de otras personas para recuperar la ambición con el instrumento o el ánimo por tocar es normal si siempre te has movido en esos ámbitos pero al final, yo creo que en muchos casos, por desilusiones o hartazgo lo mejor es hacerse independiente con el instrumento.
A mi me pasaba lo mismo hasta hace unos años, al final me di cuenta de que los grupos no duran, las implicaciones de los miembros sin diferentes y no quería seguir así. Por suerte la guitarra es un instrumento solista polifónico estupendo y no hace falta depender de nadie para que suene completo porque tocar en casa con backing tracks esperando a tocar en ese grupo perfecto que nunca llega me parece una utopía y con los años cada vez más. Que si surge la ocasión, pues mira, estupendo pero sino hay muchas cosas que tocar, demasiadas con la guitarra.
Blues acústico con dedos, Jazz chord melody, piezas clásicas, flamenqueo, ragtime, arreglos estilo Chet Atkins con bajos de pulgar y mucho, mucho más. Y si cantas un poco ya no te digo, te puedes hacer tu propio repertorio mezclando lo primero con la voz.
Así que ánimo y mi consejo sería ese, desarrollar tu parte de guitarrista solista, pero solista de verdad, de tocar solo.
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Yo munca he tocado tanto como este año, hasta 6 conciertos en 8 dias y no nos dedicanos a esto. Diciendo que no a varios locales. Y ahira bidas y pequeños eventos en pubs
No hay que desesperar. Siempre quedaran los duos acústicos, que de repente con dos mas se forman bandas
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Yo creo que va por etapas, a veces más cortas, a veces más largas.
En mi caso después de estar tocando durante bastante tiempo (12 años y 2 discos con el mismo grupo), el grupo se deshizo y aunque estuve un par de años más tocando y grabando con otra gente, al final lo dejé. En su momento lo tomé como una etapa de mi vida que ya daba por cerrada, no tenía ganas de seguir.
Pero lo dejé "del todo", vendí casi todo mi equipo (me guardé uno de los bajos "por si acaso") y he estado más de 8 años totalmente alejado de la música. Alejado... de tocar, que ni siquiera cogía el bajo para afinarlo ni limpiarlo. Tuve otros proyectos no relacionados con la música, un trabajo fijo, me casé... aunque la música nunca estuvo alejada del todo en cuanto a que estoy bastante rodeado de músicos y siempre escuchando, analizando, explorando, viendo qué transmite un determinado estilo o canción...
Y ha sido durante la pandemia cuando me volvió a entrar el mono de directo (fue precisamente mi mujer la que me animó).
Y la verdad, ese parón (podía haber sido más corto, también es verdad) me ha venido muy bien en cuanto a que tengo claro qué quiero y voy más al grano, y en lo musical también (tras unos meses para volver a cogerle el tacto al instrumento, ahora estoy explorando y aprendiendo más técnicas, estilos, géneros, y armonía del que nunca he sabido). Me reencontré con un colega con el que ya había compartido escenario y hemos montado un proyecto nuevo. En menos de un año hemos dado dos conciertos, y entre septiembre y diciembre tenemos otros cuatro, a partir de enero entramos a estudio a grabar, vuelvo a tener 5 bajos, 2 amplis una guitarra, y en breve caerá un teclado. Y ahora también estoy buscando incorporarme o formar otro grupo de un estilo totalmente diferente para dar salida a ideas y composiciones que no tienen cabida en este.
En resumen... Hay etapas. (Ya podían ser más cortas que la mía, pero al fin y al cabo son etapas). Tómalas como vienen pero no cierres puertas. Si te gusta la música acabarás volviendo a ella de un modo u otro. Y entre tanto aprovecha para vivir otras cosas y tener otras experiencias que, seguro, luego te enriquecerán (no solo en lo personal sino también a nivel de música, de géneros, de estilos, de ideas para componer, de tener cosas que decir, etc...).
Si te apetece dejarlo un tiempo, déjalo; si te apetece tocar solo en casa, hazlo así; si te apetece cambiar el rock por el folk, los boleros, o la música de autor, bienvenido sea el cambio. Creo que la música, más allá de un intérprete, es un modo de ver, de sentir, y de contar cosas. Y a veces te apetece sentirlas y/o contarlas de un modo diferente, o mirar las cosas desde un enfoque distinto.
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La pandemia ha supuesto un parón en todo, tanto en las relaciones personales, como en este caso en la música. Esperemos que de verdad haya pasado lo peor y nos podamos quitar las legañas. ROCK ON!!
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