sonicpoint escribió:
No es algo habitual que se recuerde en un foro, y con aprecio, a un dependiente, encargado de la tienda después de años. Me recuerda a lo que pasaba y aún se recuerda con Navarro (padre) de Leturiaga, una leyenda sorprendente.
Yo recuerdo a varios. Agustin es uno de ellos, que nos ayudó mucho en los inicios a unos pocos con buenos consejos, asesoramiento y simpatía. Jose de ArdeMadrid para mi fue otro tipo majo del que guardo un gran recuerdo, le compre mi primer Marshall y mi primera guitarra "de verdad" y tambien tenia manga ancha para dejarte cacharrear por la tienda, algo que en aquellos años no era lo mas comun cuando eras un chavalillo de 17 años.
Y actualmente, Adri, de MadridHifi que primero fue amigo y luego por avatares del destino, entro a currar a Madrid Hifi. Un tio grande y que ademas es forero.
Gente maja todos ellos.
De algún otro no tengo tan buen recuerdo. De hecho, a algun otro, si me hiciesen lo que me hicieron con 16 años... iba a arder Troya. De los que peor recuerdo guardo son de los de Radical. Les compre un bajo y para dejarme probarlo me hicieron volver a mi casa a por el dinero porque si no les enseñaba la pasta no me dejaban probar. Y asi fue. Les tuve que enseñar las 70.000 pesetas del bajo para que me dejasen entrar a la cabina a probarlo. Demencial. Espero que esa gente ya no este cara al publico.
sonicpoint escribió:
La LP esa que dice bauer era roja translucent, no?....con la nitro de los bordes de la pala lago tocada por el colgador que tenía la mierda espuma esa que reacciona con la nitro; bueno lo mismo no era esa pero LP no solía haber más de una.
Ostias pues no recuerdo el color, te estoy hablando de 1997 o 1998... ya ha llovido mucho. De allí (Adagio Hermosilla) recuerdo dos en concreto. La primera Duesenberg que probé, que era color azul sparkle. Me pareció una preciosa maravilla aunque yo no sabia tocar apenas nada. Y allí también probé una de las peores Gibson Les Paul que jamas he tocado jamas, una Special Faded marron, que de lo mal ajustada y hecha que venia, los trastes se enganchaban en los dedos y los bordes de arriba cortaban. Terrible. De hecho nos la dejaron como curiosidad, porque creo que la iban a mandar de vuelta.
En Adagio compre muchas de las cosas de mis primeros trastos. Grandes recuerdos de la tienda de Hermosilla.
Perdón el resto por el flashback de abuelo cebolleta, pero a veces estas cosas me traen recuerdos.